Amnistía Internacional verificó casos de represión y uso excesivo de la fuerza en las Américas durante la pandemia de COVID-19
Las autoridades de todos los Estados de las Américas deben evitar recurrir a medidas represivas que impongan restricciones indebidas sobre los derechos humanos para “proteger” a la población del COVID-19.
Amnistía Internacional desarrolló el proyecto Evidence Lab a través del cual especialistas verificaron casi 60 casos en la región en las últimas siete semanas que apuntan al uso de tácticas arbitrarias, represivas y punitivas por los gobiernos.
Amnistía Internacional verificó videos en los que se observa el uso de la detención como primera medida y no como último recurso, el uso de fuerza innecesaria y excesiva para hacer cumplir el confinamiento por el COVID-19, y la imposición de cuarentenas en condiciones inhumanas.
“El COVID-19 nos afecta a todas las personas, pero no de la misma forma. Muchas de las que sufren represión en las Américas son personas marginadas que necesitan acceso a alimentación, asistencia médica y otros servicios básicos, no ser criminalizadas y sometidas a malos tratos. Los gobiernos se equivocan si piensan que con medidas represivas van a proteger a la gente de esta enfermedad”, dijo Erika Guevara Rosas, directora de Amnistía Internacional para la Américas.