Funcionarios y religiosos coincidieron en priorizar a los barrios populares frente a la pandemia
Las conclusiones fueron parte de una videoconferencia organizada por la Pastoral Social de la Iglesia Católica Argentina, bajo el lema “Nadie se salva solo; miremos al futuro con creatividad”.
La charla estuvo moderada por el obispo de la diócesis de Avellaneda-Lanús, Rubén Frassia, y participaron los ministros de Ambiente, Juan Cabandié; de Salud porteño, Fernán Quirós; el jefe de Gabinete del ministerio de Salud bonaerense, Enio García, y el epidemiólogo e integrante del consejo asesor del gobierno nacional, Eduardo López.
López reseñó que “la pandemia encontró a la Argentina con un sistema de Salud no preparado», con 40 por ciento de pobreza, el registro del primer caso el 3 de marzo y el inicio el 18 de marzo del aislamiento, lo que «dio tiempo a hacer los ajustes posibles al sistema sanitario”.
El epidemiólogo sostuvo que “la cuarentena fue acompañada por el programa DetectAr, que demostró ser una gran herramienta de diagnóstico», y relevó que la pandemia dejó como eseñanza que «no solo hacen falta más recursos para el sistema de Salud», sino también en la necesidad de «pensar cómo invertirlos».
“Tenemos esperanzas en que llegue una vacuna, pero el aprendizaje más importante que nos tiene que dejar la pandemia es que tenemos que tener en cuenta a nuestros conciudadanos de los barrios más populares porque está claro que estos eventos sanitarios impactan con mucha mayor intensidad en esos sectores”, completó López.
“Tenemos que entender que nuestra salud no es un tema solamente médico, que nuestro bienestar implica muchas otras cosas y para eso tenemos que trabajar en comunidad y vincularnos desde lo colectivo”, agregó.
Quirós señaló, además que la pandemia evidenció «desigualdades» frente a las que es necesario «entender que el derecho individual es algo que se contiene en el derecho colectivo”.
El jefe de Gabinete del ministerio de Salud bonaerense, Enio García, subrayó que “la pandemia empieza a afectar con más fuerza a los sectores populares, y eso era esperable en una sociedad desigual» como la argentina, tal como ocurrió «en EEUU con la población afrodescendiente o en Brasil”.
El ministro de Ambiente, Juan Cabandié, apuntó que “la comunidad científica está de acuerdo en que una de las principales causas de la pandemia de Covid-19 es la degradación ambiental», por lo que llamó a tomar en cuenta las señales que la naturaleza da por ese deterioro.
“Siempre son los sectores más vulnerables los que están más expuestos a eventos climáticos o sanitarios como esta pandemia, es necesario que construyamos la agenda de transición que nos impone el cambio climático porque ya no hay tiempo para postergarla”, finalizó.
