Afirman que la lonsdaleíta, el diamante formado en un planeta hace millones de años, existe en la naturaleza

Una serie de extraños diamantes, nacidos en un antiguo planeta enano de nuestro propio Sistema Solar, llevan años siendo encontrados aquí, en la Tierra, en el interior de unos raros meteoritos llamados ureilitas, procedentes del manto de aquél mundo desaparecido. Ahora, un equipo de investigadores del CSIRO, el Sincrotrón australiano y las universidades Monash, RMIT y Plymouth, ha desvelado por fin el secreto de su formación. Con toda probabilidad, esos diamantes se formaron poco tiempo después de que el planeta enano chocara con un gran asteroide hace unos 4.500 millones de años.

En un estudio recién publicado en «Proceedings of the National Academy of Sciences» (PNAS), los científicos confirman la existencia de lonsdaleíta, una rara forma hexagonal del diamante, en las ureilitas procedentes del manto del planeta desaparecido. La lonsdaleíta debe su nombre a la famosa cristalógrafa pionera británica Dame Kathleen Lonsdale, que fue la primera mujer elegida como miembro de la Royal Society.

Según Dougal McCulloch, uno de los autores del estudio, el equipo ya pensaba que la estructura hexagonal de los átomos de lonsdaleíta los hacía potencialmente más duros que los diamantes normales, que tienen una estructura cúbica. «Este estudio -afirma- demuestra categóricamente que la lonsdaleíta existe en la naturaleza. También hemos descubierto los cristales de lonsdaleíta más grandes conocidos hasta la fecha, que tienen un tamaño de hasta una micra, mucho, mucho más delgado que un cabello humano».

Los investigadores creen que la estructura inusual de la lonsdaleita podría ayudar a desarrollar nuevas técnicas de fabricación para materiales ultraduros, por ejemplo, en aplicaciones mineras.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *