Hindúes desafían al covid en multitudinaria congregación religiosa
Drones rociaron este viernes con agua sagrada del Ganges a miles de peregrinos que aguardaban meterse al río para realizar su ritual anual en el festival hindú Gangasagar Mela, en un intento por contener a la multiutud y evitar que se propaguen los contagios de coronavirus.
Las autoridades admitieron ya que no podrán contener a los peregrinos, en su mayoría sin mascarilla, que acuden en masa a expiar sus pecados en el río.
«La mayoría de los peregrinos están dispuestos a desafiar las normas» anticovid, afirmó un oficial de policía.
«Creen que Dios los salvará y que bañarse en el afluente (del Ganges) los purificará de todos sus pecados, incluso del virus si son contaminados», agregó, citado por la agencia de noticias AFP.
Aunque la variante Ómicron se está propagando a gran velocidad en India, la semana pasada un tribunal de Calcuta autorizó la celebración de la Gangasagar Mela en la isla de Sagar en la desembocadura del Ganges, en el estado oriental de Bengala occidental.
Se espera que hasta tres millones de peregrinos hindúes acudan este viernes a la isla.
«Desde el alba, ya había un océano de personas», aseguró un funcionario local, Bankim Hazra, y resaltó que «agua sagrada del Ganges era pulverizada por drones sobre los peregrinos (…) para contener a la muchedumbre».
Aquella aterradora ola epidémica se produjo tras el festival de la Kumbh Mela, una de las mayores congregaciones religiosas del mundo, al que acudieron unos 25 millones de hindúes
«Pero los sadhus (ascetas con el cuerpo recubierto de cenizas y la cabeza de rastas) y un gran número de personas prefieren quedarse para darse un baño», agregó Hazra.
El jueves, India registró más de 260.000 nuevos contagios y 315 muertos.
En el pico de la pandemia, en mayo pasado, este país de 1.300 millones de habitantes registraba más de 400.000 nuevas contaminaciones, y unos 4.000 fallecimientos diarios, en medio de traumatizantes escenas en los hospitales, desbordados de enfermos agonizantes
Aquella aterradora ola epidémica se produjo tras el festival de la Kumbh Mela, una de las mayores congregaciones religiosas del mundo, al que acudieron unos 25 millones de hindúes.
Igual que la Kumbh Mela, Gangasagar Mela atrae a fieles procedentes de todo el norte de India, que viajan a bordo de trenes, colectivos y barcos atestados para llegar a la isla.